Cuando acepté la petición de los músicos, de una entrada
sobre la distonía focal, realmente no sabía bien dónde me estaba metiendo. Al
ser una dolencia que no conocía lo suficiente, me he visto obligada a moverme
un poco más de la cuenta y estudiar todas las ambigüedades que me he ido
encontrando por el camino. Esto, unido a la falta total de tiempo, ha hecho que
esta entrada tardara en llegar…
Si empezamos por el principio, a la distonía focal en el
músico, por su rareza y especificidad, no se le ha dedicado mucho tiempo de
estudio y por tanto no está descrita con todo el detalle que se merece. Durante
muchos años se había pensado que la distonía focal era un trastorno de tipo
psiquiátrico; una especie de fobia al instrumento. Pero actualmente sabemos,
con total seguridad, que se trata de un trastorno no degenerativo, de tipo
neurológico, que afecta, básicamente, la forma de aprendizaje y la organización
del sistema motor y sensitivo.
La distonía focal es un trastorno caracterizado por la
aparición de una actividad muscular anormal que incluye acciones involuntarias
como contracciones, espasmos, temblor, muecas etc., estos impiden al músico
manejar adecuadamente los músculos implicados en la ejecución o práctica de su
instrumento. A menudo, las dificultades en los dedos son interpretadas por el
músico como una evidente "falta de práctica". Debido a eso, suele
ensayar más intensamente, que es justo lo que no se debe de hacer.

Síntomas.
Según el estudio “Análisis
clínico de la distonía focal en los músicos. Revisión de 86 casos”
realizado por Institut de Fisiologia i Medicina de l´Art-Terrasa, Barcelona,
existen ciertos síntomas percibidos por los músicos, que de mayor a menor
frecuencia serían los siguientes:
- Descontrol de los movimientos voluntarios manuales sobre
el instrumento.
- Dificultad o enlentecimiento digital.
- Tensión o rigidez de la mano o el brazo.
- Temblor en los dedos.
- Dolor en la región afectada.
- Falta de independencia de los dedos.
- Presencia de dolor en algún momento de la evolución de la
afección.
En la mayoría de los casos, estos síntomas aparecían en el
momento de tocar las primeras notas durante la práctica, mientras que en otros
músicos estos mismos síntomas, eran más intensos cuanto más difícil era la obra
técnicamente.
En algunas ocasiones los propios músicos han manifestado
haber estado sometidos a cambios de rutina de trabajo o estrés psíquico justo
antes de la aparición de los primeros síntomas de distonía.
Clasificación.
Se han clasificado los distintos tipos de distonía
dependiendo de factores como la edad de comienzo, la etiología o la
distribución. Aquí nos quedamos con la tercera propuesta que es la que más nos
interesa. La distonía puede afectar
diferentes partes del cuerpo, por lo que se ha aceptado la clasificación en
focal, segmentaria, generalizada o multifocal.
1. Distonía focal significa
que está afectada sólo una parte del cuerpo, en el caso de nuestros músicos
este tipo se le conoce como la distonía ocupacional. También puede darse en
profesiones como la de escritor o informático.
2- Distonía
segmentaria se da cuando están implicadas dos o más partes del cuerpo. Por
ejemplo, un violinista es propenso a la distonía axial que compromete a la
cabeza y cuello.
3- Distonía
generalizada se define como la afectación de al menos una pierna más
cualquier otra región del cuerpo. Algún caso de bateristas nos podemos
encontrar con este tipo de distonía, aunque no es muy frecuente, por no decir
totalmente inusual.
4- En la distonía
multifocal se ven afectadas dos o más segmentos del cuerpo que no tienen
continuidad entre ellos.
Para poder tratarla es imprescindible, además de
clasificarla correctamente, identificar con certeza el tipo de movimiento
involuntario y si hay movimientos acompañantes. Los movimientos distónicos
pueden ser continuos, y al igual que cualquier movimiento extrapiramidal
desaparece durante el sueño. Así mismo tiene diferentes variaciones durante el
día y pueden estar influidos por estados emocionales, aumentar con la fatiga y
disminuir con la relajación.
Tratamientos.
Hasta hace pocos años la distonía focal del músico se
consideraba una afección incurable. Actualmente, aunque los tratamientos no son
efectivos en todos los casos, ya existen posibilidades terapéuticas
interesantes. Las medicinas alternativas, las técnicas de consciencia corporal
o relajación han ofrecido resultados consistentes.
Pero antes de meternos en las terapias alternativas, es interesante
que sepáis que, para la mayoría de las distonía focales está aceptada como
tratamiento de elección la inyección repetida de toxina botulínica. Al
inyectarla de manera intramuscular o subcutánea sobre el músculo contraído, las
contracciones se reducen dramáticamente, sin que haya apenas efectos
secundarios.
Pero este no es mi campo, y lo que quiero es ahorraros
inyecciones y tratamientos agresivos. Para ello existen técnicas de renombre
que pueden ser altamente efectivas para tratar la distonía focal: La Acupuntura y la Osteopatía.
Acupuntura –
Craneopuntura
Además de la acupuntura, que es una de las técnicas más
conocidas, la Medicina Tradicional China utiliza una gran variedad de
herramientas complementarias muy eficaces, como es el caso de la craneopuntura.
Se trata de la aplicación de agujas en puntos del cuero cabelludo para la
recuperación de diferentes dolencias.
En la craneopuntura las agujas se ubican en zonas del cráneo
específicas, tomando como medida ciertas funciones del sistema nervioso central
(la corteza cerebral). Esta terapia resulta muy útil en el tratamiento de
afecciones del sistema nervioso como es el caso de la distonía focal.
Este tratamiento se caracteriza por tener una aplicación muy
simple y además, por ser muy seguro. Tiene efectos curativos rápidos y una amplia variedad de indicaciones,
sin efectos secundarios, por eso puede
ser una herramienta eficaz incluso para
combinarla con otras técnicas y terapias. La Craneopuntura describe zonas que se corresponden con órganos
y vísceras descritos en Medicina China, y no posee contraindicación alguna.
Osteopatía.
Los doctores
en osteopatía practican un tipo de medicina que observa al paciente
como una “persona completa”. No basta con ver la parte lesionada, sino que
deben centrar la atención en todo el sistema músculo-esquelético para ver cómo
la lesión ha influido en los otros sistemas del cuerpo.
Aunque a la
Osteopatía se la relacione fundamentalmente con problemas que afectan al
aparato locomotor, lo cierto es que restablece el equilibrio perturbado
mediante técnicas manuales dirigidas a cualquiera de los tejidos afectados,
sean estos del sistema musculoesquelético, visceral, nerviosos etc.
Esto nos
hace distinguir entre los tres grandes grupos en los que la osteopatía basa sus tratamientos.
1- Osteopatía estructural: las manipulaciones y maniobras se centrarán en el sistema
musculoesquelético.
2- Osteopatía
visceral: se analizan en profundidad las estructuras viscerales, su
movilidad y la repercusión que puedan estar ejerciendo sobre otros sistemas
aplicando maniobras específicas para ellas.
3- Osteopatía sacro
craneal: Se centra en los
problemas craneales y su influencia en el Sistema nervioso central. Esta
rama de la osteopatía trabaja a un nivel más sutil, pero a la vez
profundo.
Ayuda al
funcionamiento del sistema nervioso autónomo y permite corregir modelos
negativos del comportamiento. También puede corregir articulaciones dislocadas
y fuera de su sitio, lesiones y limitaciones; por ejemplo “hombro rígido”,
liquido en las articulaciones, problemas de mandíbulas que no encajan, “codo de
tenista”, y las distonías focalizadas.
Una vez terminado el
tratamiento, llega sin duda la parte más larga y costosa, que consiste en
cambiar los hábitos del músico a la hora de tocar su instrumento. Evitamos así
segundas partes… que nunca fueron buenas…
Reeducación del cuerpo.
Un Quiromasajista te
puede ayudar a reeducar el cuerpo para realizar esos movimientos que sentenciaron tu cuerpo a una distonía focal,
de una manera más beneficiosa.
Hay que valorar el
tono muscular, la postura, el equilibrio y la coordinación y dependiendo del
resultado se aplican diferentes técnicas:
1- La
Técnica de Bobath: Es una terapia aplicada a tratar los desórdenes del
movimiento y la postura derivados de lesiones neurológicas centrales. El tratamiento
se basa en la comprensión del Movimiento normal, utilizando todos
los canales perceptivos para facilitar los movimientos, y las posturas
selectivas que aumenten la calidad de la función. Con todo esto puede ser una
rehabilitación a tomar en cuenta.
2- La Cinesiterapia
activa: es el medio de curación por movimiento y ocupa un lugar destacado
como método de tratamiento de muchas enfermedades, sobre todo en el aparato
locomotor. Básicamente consiste en el conjunto de ejercicios, analíticos o
globales, realizados por el mismo paciente con sus propias fuerzas, de forma
voluntaria o autorrefleja, y controlados, corregidos o ayudados por el
Quiromasajista. Su objetivo es recuperar o mantener la función muscular y
facilitar los movimientos articulares integrándolos en el esquema corporal con
normalidad.
3- Ejercicios
específicos:
Si al realizar un ejercicio experimenta dolor, pare y
consulte con su terapeuta.
Una forma magnífica de realizar ejercicio es caminar y
nadar.
Evite cualquier situación incómoda.
Los ejercicios de elongación son muy eficaces en relajar los
músculos tensos y en la prevención de pérdida de movilidad en las
articulaciones. Estos ejercicios se recomiendan para mejorar el vigor en los
músculos debilitados.
Relajación.
Realizar
ejercicios de relajación es una buena manera de complementar el tratamiento y
reeducar al cuerpo. Existen muchas maneras de conseguir un estado de relajación
que pueda beneficiar tanto a músculos como a articulaciones.
Los
masajes relajantes son una buena
opción. Existen dos tipos:
-
Masaje superficial lento, que suele ser corto y prolongado, posee una acción
sedante que aumentará con la prolongación.
-
Masaje profundo lento, que posee una acción calmante y descongestionante,
mejorando la asimilación de los tejidos y eliminando las sustancias de
desecho., acción que se acentúa si el masaje se prolonga.
Con
las distintas técnicas de masajes
relajantes que existen además de lograr relajar los músculos
y de darles un merecido descanso, también se logra obtener un efecto positivo
en la circulación y en el estado general de ánimo.
El Yoga es una práctica que ya se ha
mencionado en otras ocasiones. Te ayuda a ser consciente de cada hueso, de cada
músculo y de cada articulación, en definitiva, te hace ser partícipe de cada
movimiento. Al fin y al cabo el yoga consiste en la búsqueda de un equilibrio
entre cuerpo y mente para favorecer la relajación y la concentración de quien
la practica.
En
mi afán de ofreceros la mejor información que pueda conseguir, acudí a una
profesora de Yoga, con años de experiencia, que además tengo la suerte de que
también es amiga, y le pedí su opinión sobre este asunto. Su respuesta me ha
gustado tanto que os la muestro con sus puntos y sus comas:
"Efectivamente el yoga permite "ampliar la conciencia" empezando por el cuerpo y terminando por la mente, esto hace posible el reconocimiento de zonas concretas del cuerpo como músculos, articulaciones, etc... Al igual que sensaciones, contactos y movimientos sutiles.
Yoga permite y ayuda a unir (Yoga = unión) el cuerpo con la mente (lo que los occidentales solemos tener tan desunido).
Mi humilde opinión es que efectivamente para esa dolencia tan concreta puede ser de gran utilidad la práctica de yoga. Como la Distonía focal tiene un componente psicosomático y emocional vinculado con el estrés (miedos, preocupaciones, frio o incluso actividad física intensa...) del que no siempre se es consciente, puede beneficiar enormemente a la hora de reconocerse y conocerse en situaciones o estados de ese tipo, además de aprender a controlarlos y/o minimizarlos.
No olvides que el yoga trabaja aspectos psicofísicos y con la práctica también, patrones conductuales. Dentro de su práctica no solo hay ásanas, sino pranayamas (ejercicios respiratorios) y espacios o momentos concretos de meditación.
Lógicamente no es posible asegurar su curación, ni mucho menos, pero si se puede lograr quizás reducir tanto la frecuencia como la intensidad, incluso con ejercicios respiratorios sencillos pero muy eficaces. Creo haber leido en algún lado que para la Distonía Focal centrada en la zona de la cara, practicar "yoga facial" ha resultado bastante eficaz."
Cada
persona puede tener un modo distinto de relajarse, lo importante es encontrar
un momento del día para centrarnos en nuestro cuerpo y ser conscientes de sus
necesidades. Prestar atención y saber escucharnos es una buena prevención.
A
cerca de la Distonía Focal, poco me queda por deciros, sólo añadir dos datos
significativos. En primer lugar, como todas en la inmensa mayoría de lesiones
que hemos visto hasta ahora, si se tratan a tiempo quedarán simplemente en una
mala experiencia, de la que deberías aprender.
En
segundo lugar y para los más curiosos, este tipo de distonía focalizada también
afecta a escritores e informáticos y se le conoce en este caso como calambre del escritor.
Muchas gracias por haber llegado hasta aquí.
Muy interesante. También la relación que tienen con informáticos y escritores.
ResponderEliminara los bateristas tambien les afectas?porq me ha dolido mucho un tendon de la muñeca y otro del pie
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar